07/10/2022
PENSÓ QUE LO LLAMABAN POR LA CORTADORA DE PASTO que tienen en una casita de verano en Suecia. El experto en genética Svante Paabo se acababa de tomar una última taza de té antes de ir a buscar a su hija y recibió esta llamada.
No era por la cortadora de pasto: había obtenido el Premio Nobel de Medicina 2022.
El científico sueco Svante Paabo (67) estaba en Leipzig, en el Instituto Max Planck de Antropología Evolutiva que él fundó y que aún dirige cuando le comunicaron que había ganado el Premio Nobel de Medicina por la secuenciación del genoma de los neandertales y la creación de la paleogenómica, informó la Asamblea Nobel del Instituto Karolinska de Estocolmo. Sus descubrimientos sobre la evolución humana brindaron información clave sobre nuestro sistema inmunológico y aquello que nos hace únicos en comparación con nuestros primos extintos.
“Svante Paabo ha descubierto la composición genética de nuestros parientes más cercanos, los neandertales y los denisovanos”, dijo Nils-Goran Larsson, miembro de la Asamblea Nobel.
Durante mucho tiempo se creyó que el hombre moderno no tenía genes de los neandertales, unos cazadores regordetes que dejaron de existir hace decenas de miles de años, pero “Paabo y su equipo descubrieron, de manera sorprendente, que el flujo de genes se había producido desde los neandertales hasta el Homo sapiens, lo que demuestra que tuvieron hijos juntos durante los períodos de coexistencia”, explicó Anna Wedell, presidenta del Comité Nobel.
En 2010, Paabo publicó la primera secuencia genómica de un neandertal. Su equipo logró determinar que las secuencias de ADN de los neandertales eran más similares a las secuencias de humanos contemporáneos de Europa o Asia que las de los provenientes de África. Esto era muy llamativo. Llegaron a la conclusión de que ¡entre el 1% y el 4% del genoma de los europeos y asiáticos proviene de los neandertales!
El aporte de los neandertales ha estado lejos de ser positivo. En 2020, un informe de Paabo y algunos colegas estableció que una variante genética heredada de los neandertales cuando ambas especies se cruzaron hace 40 mil años hacía que quienes llevaban la variante tuvieran muchas más posibilidades de necesitar ventilación artificial si se infectaban de coronavirus. “Más de un millón de individuos adicionales han fallecido debido a esta variante de neandertal que llevan”, señaló Paabo.
Los descubrimientos del equipo de Paabo —que incluyen la extracción del ADN del dedo meñique del Hombre de Denisova— han permitido comprender mejor nuestra historia evolutiva. También se habría intercambiado genes entre los denisovanos y poblaciones del sudeste asiático (hasta un 6%).
El padre de Svante Paavo, Sune Bergstrom, obtuvo el Premio Nobel de Medicina en 1982. (Es el octavo caso de padre e hijo ganando un Nobel.) Su madre era Karin Paabo, una investigadora química de Estonia que se integró en Suecia al laboratorio del reputado bioquímico Sune Bergstrom. Ambos tuvieron una relación extramarital de la cual nació Svante en 1955.
Es una cuestión genética.
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