LA tradicional marca de autos deportivos Lamborghini se alió con el Massachusetts Institute of Technology (MIT, Instituto Tecnológico de Massachusetts) para desarrollar su última creación: el Lamborghini Terzo Millenio, que pretende ser el superauto del próximo milenio, según la página de la Fórmula E. 

Dicen que, como Robocop, se autorrepara solo. 

“Para nuestro departamento de investigación y desarrollo, colaborar con el MIT es una oportunidad excepcional de hacer lo que sabemos hacer mejor: volver a escribir las reglas de los superautos deportivos”, afirma Stefano Domenicali, presidente y CEO de Lamborghini, en el diario El País. 

Se trata de un vehículo 100% eléctrico, cuyo sistema de propulsión se basa en cuatro motores, uno acoplado a cada rueda. Pero el aspecto clave del Lamborghini Terzo Millenio es su carrocería, hecha de fibra de carbono: está formada por nanotubos ultrarresistentes que mejoran su rigidez y ayudan a aligerar el peso; además, dejan espacio para unas baterías ultrafinas que se pueden adaptar a la forma del coche. Al final, lo que ocurre es que la propia carrocería actúa como un sistema de baterías, que se comportan como supercondensadores y reducen los tiempos de carga. En el fondo, todo el auto funciona como una batería. En esto radica el enfoque innovador de Lamborghini. 

El problema de estos materiales es que, si se rompen, resulta muy caro repararlos. En el MIT están trabajando en la solución: una fibra de carbono que se autorrepara. El auto va vigilando de manera constante el estado de los diversos paneles y, cuando encuentra pequeños desperfectos, un sistema de microcanales los arregla.  

Explican en Lamborghini: “el objetivo es dotar al Terzo Millennio de la capacidad de llevar a cabo su propia monitorización del estado, detectar las grietas y daños que se pudieran producir tras un accidente, por toda su subestructura, limitando o reduciendo a cero los riesgos asociados a la presencia y propagación de grietas en la estructura de fibra de carbono”. 

En Fórmula E se sorprenden de que Lamborghini, una marca tan vinculada a la potencia bruta del petróleo, se interese en la potencia eléctrica. Pero Automobili Lamborghini ha pensado en un nuevo enfoque. Piensan que el coche deportivo del futuro debe utilizar electricidad en lugar de gasolina. “Los sistemas eléctricos generan alta eficiencia y ofrecen características interesantes como la posibilidad de recuperar energía cinética y suministrar enormes picos de potencia. Para aprovechar al máximo las oportunidades que ofrece la electrificación, el sistema de acumulación debe estar orientado a la potencia y ser simétrico, a fin de permitir un alto rendimiento y la mayor recuperación de energía posible”.  

En Sant’Agata Bolognese sostienen que las baterías actuales no son suficientes para aprovechar esta oportunidad, por lo que se necesita dar un gran salto adelante: el objetivo de Lamborghini es desarrollar un supercondensador innovador capaz de cerrar esa brecha con las baterías convencionales en términos de densidad energética, preservando una densidad de potencia excepcional. 

Los de Bolonia también están enfrentando el tema de la falta de ruido, que hace sufrir a los tifosi. “La adopción de un tren de potencia eléctrico requiere definir un sonido capaz de sustituir al del actual V12. Se necesita una profunda investigación para evaluar las oportunidades que ofrece el nuevo tren de potencia, en busca de cada oportunidad de generar el sonido del Terzo Millennio”. 

Por innovación no se quedan. ¿Qué irán a hacer? 

Más allá del futuro lanzamiento del Terzo Millennio, el Grupo Volkswagen (dueño de Lamborghini) piensa estrenar varios superautos eléctricos de sus otras marcas de lujo, afirma SoyMotor.com. Bentley, Bugatti y Porsche tendrán su eléctrico de altas prestaciones. 

Es la “electromovilidad”. En Chile, ya tenemos buses de Transantiago eléctricos en la línea 516. Muchas marcas están comprometidas con este concepto: Mercedes-Benz, Audi (también del Grupo Volkswagen), Nissan, BMW, Renault, DS, Porsche, Jaguar, Mahindra y Venturi, muchos de ellos con equipos en el Campeonato de Fórmula E de la FIA, que tendrá una fecha en Santiago el 3 de febrero: el Antofagasta Minerals Santiago E-Prix 2018.